Si
bien la competencia general de la carrera no se ha modificado desde la
fundación de la misma, el impacto de las nuevas tecnologías y como consecuencia
de ello, los cambios en las formas de solución de los problemas técnicos, se
traduce en la emergencia de nuevas realidades laborales, lo que a su vez incide
en la demanda de nuevas o distintas competencias, respecto a las tradicionales,
tanto en el sector productivo como en el de servicios.
Así mismo, la responsabilidad de la
educación superior es la de generar y difundir estas transformaciones e
innovaciones, particularmente en el área tecnológica, lo que incrementa su
responsabilidad en el proceso de formación de profesionales, coadyuvando en
unos casos y acompañando, en otros, el progreso científico y técnico de la
sociedad.
Para lograr los correspondientes
niveles académicos se hace necesario realizar rediseños curriculares. Estas
reformulaciones, además de mayores compromisos presupuestarios, requieren
también o sobre todo, no sólo una actualización de conocimientos de acuerdo al
desarrollo científico técnico actual, sino más bien, el diseño y cumplimiento
de un perfil profesional orientado a desarrollar las acciones básicas
generalizadas de una determinada profesión, que le permita al profesional una
movilidad en su campo de acción, es decir, se trata de una búsqueda de
metodologías y ajustes en los contenidos, que apunten a despertar en el
estudiante su capacidad creativa y también brindar los procedimientos
necesarios para aplicar el saber adquirido a la solución de problemas reales
que le plantea el contexto regional y nacional.
De la literatura sobre el tema, se
desprende que existen muchas formas de definir el Perfil Profesional. Así por
ejemplo, Arnáz[1]
define que “es una descripción de las características que se requieren del
profesional para abarcar y solucionar las necesidades sociales”.
En el texto “Metodología de diseño
curricular para la educación superior” de varios autores[2], se
considera que el Perfil Profesional “...es la determinación de las acciones
generales y específicas que desarrolla un profesional en las áreas de acción,
tendientes a la solución de las necesidades sociales previamente advertidas”.
Miguel Zabalza, más que presentar una definición, indica los elementos a
considerar para elaborar o construir el Perfil Profesional.
Así mismo, mientras que algunos
autores especifican solo las características laborales en cuanto a
conocimientos y habilidades específicas a una profesión, otros autores incluyen
en su definición valores y actitudes que deberían caracterizar al futuro
profesional.
En el texto citado, de varios autores[3],
se explica que los principales componentes que deberá incluir el Perfil
Profesional, son: conocimientos generales y laborales en las que se
desempeñará el profesional, las acciones o tareas que dentro de ellas realizará
en función de las necesidades detectadas y las poblaciones beneficiarias de la
labor del profesional.
Considerando los componentes que deben
comprender la elaboración del Perfil Profesional, se puede establecer que para
la carrera de Ingeniería Electromecánica, aquéllos son:
- Tener en
cuenta el encargo social: La universidad debe responder a los requerimientos de la
sociedad, de recursos humanos capacitados para atender los problemas de diseño
y funcionamiento de los sistemas eléctricos, mecánicos y electrónicos, pues no
existe prácticamente ninguna actividad productiva y del quehacer humano que no
requiera del suministro y manejo de las energías eléctrica y mecánica.
- Mercado
profesional: Por la infomación y datos que se tiene de los titulados y
colegas del área electromecánica, existe un mercado laboral el cual evoluciona
y crece en la medida que aumenta el sector productivo, el consumo de energía
eléctrica para usos domiciliarios en las zonas urbanas y rurales y los usos y
aplicaciones de la electricidad en las distintas áreas de las actividades de
servicios.
- Conocimientos
y habilidades: La definición de este aspecto está ligado a las
competencias que debería manejar el titulado en el campo laboral. En el
presente trabajo, se considera el relevamiento de la información mediante
encuestas realizadas.
- Vocación
regional: Teniendo en cuenta algunas características productivas
específicas de la región, que corresponde a una vocación agro-industrial y la
existencia de recursos naturales petrolíferos y gasíferos, el Perfil
Profesional incluirá, en su formulación, aspectos técnicos y ambientales que
derivan de esta particular situación productiva.
Resumiendo, podríamos decir que el
Perfil Profesional es una guía que delimita las características fundamentales
que el futuro profesional deberá poseer y cuya aplicación le permite plantear y
contribuir a resolver los problemas (básicamente técnicos y tecnológicos) en el
ejercicio profesional.
Deseamos también observar, que por el
empleo de la metodología tradicional de elaborar el Perfil Profesional y los
planes de estudio y en parte debido a la falta crónica de talleres con
equipamiento y herramientas mínimos, se ha dado mucha más importancia a los
conocimientos teóricos que deben adquirir
los estudiantes que a las destrezas de
manejo de instrumentos, de manejo de herramientas, de metodologías de trabajo
real y otros aspectos que solo el conocimiento de las competencias laborales
puede proporcionar.
Un definición
del perfil basado en competencias, establece que el titulado es competente, cuando
transfiere el conocimiento adquirido, a la resolución de problemas. Esta
formación pone particular énfasis en el desarrollo del conjunto de
conocimientos, habilidades y conductas (traducidas, en parte, en la aplicación
de normas o estándares, nacionales o internacionales) que permiten a los
egresados a acceder al mundo del trabajo, conservar su empleo, reforzar y
acrecentar sus capacidades profesionales a lo largo de la vida. En otras
palabras, el eje del desafío se centra en el desarrollo de un enfoque que,
estrechamente relacionado con la vida laboral y la inserción profesional,
articule adecuadamente las dimensiones del “saber”, del “saber hacer” y del
“saber ser”, mediante el desarrollo de competencias.
La Comisión de rediseño curricular
consultó a través de encuestas, con los diferentes sectores profesionales,
tales como: Sociedad de Ingenieros de Bolivia, filial Santa Cruz, titulados
entre 5 a 10 años de ejercicio profesional, que actualmente se desempeñan en
empresas privadas o instituciones públicas, docentes de la carrera y
empleadores.
La recolección de la información de
los titulados y empleadores la realizaron los integrantes de la Comisión de
rediseño Curricular en cada centro laboral o a través de Internet. Para los
docentes, se convocó a una reunión trabajo, donde se explicaron los objetivos de
la encuesta y se obtuvo la colaboración de los asistentes. Se obtuvieron 36
encuestas de titulados y 13 de empleadores. Hay que tener en cuenta además, que
en el presente año se está realizando el proceso de Autoevaluación y se está
aprovechando las encuestas a titulados y empleadores para actualizar la
información relativa a las competencias y otros datos relativos a temas de
interés del egresado.
0 comentarios:
Publicar un comentario